La decisión de vivir o morir
Un hombre tuvo que tomar una decisión… vivir o morir junto a su perro. Entonces abandonó a su perro en una montaña nevada.
Tomar una decisión conlleva siempre un riesgo, puede ser a favor o en contra de lo que deseamos.
Paul Finnegan de Shotts en Escocia, afirmó que se vio obligado a tomar la decisión de abandonar a su perro Meg, un border collie de 12 años de edad, bajo condiciones climáticas extremas en una montaña de más de 930 metros de altura.
Paul agregó que todos pensaban que el animal podía soportar la ardua caminata para escalar la montaña, pero debido al desgaste extremo al que estuvieron expuestos, el perro colapsó y fue entonces que tomó la decisión de abandonarlo.
La familia de Paul afirmó que él intentó regresar con su perro a casa, pero fue obligado a decidir entre su supervivencia o dejar a Meg.
Abandonó a su perro en una montaña
Rescatistas expertos en montañas definieron la elección como correcta. Sin embargo, se le advirtió que este tipo de actividad para su Collie de 12 años era muy exigente, sin embargo Paul no prestó suficiente atención a ello.
A pesar de las declaraciones de los expertos, los usuarios en las redes sociales cuestionaron la decisión tomada por Paul que recibió críticas muy duras y algunas muy ofensivas.
Las repercusiones en las redes sociales
Para muchos, fue un acto cruel y atroz, algunos de los usuarios comentaron que una persona con sentido común no sometería a un perro de 12 años a una caminata tan exigente.
Otros afirmaron que ese acto de irresponsabilidad debe ser castigado por la justicia.
«El pobre perrito se cansó y sus piernas cedieron a causa de su edad. Dejó a su animal morir».
La familia asumió la defensa de Pablo e insistió en que esos usuarios no entendieron lo difícil que fue la decisión adoptada.
Además aclararon que Paul nunca dejó morir a Meg. Que había hecho todo lo posible. Nadie podía acusarlo.
Además lo cargó parte del tiempo mientras luchaba por mantenerse en pie y avanzar a pesar del fuerte viento y la lluvia.
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El líder del equipo de rescate de la montaña de Oban, Andy Ravenhill, dijo que las críticas dirigidas contra el dueño del perro fueron duras.
Especialistas, voluntarios y hasta el propio Paul fueron en búsqueda de Meg cinco días después para ver si lo encontraban sin éxito.
Paul tuvo que tomar una decisión complicada entre su vida y / o la posibilidad de morir con su perro. Lo dejó en un lugar seguro mientras buscaba ayuda y tenía toda la intención de volver a buscar a Meg. Sin embargo Meg no apareció.
Exponer a su perro a una caminata tan desgastante lo hace responsable por la vida de Meg. ¿Había necesidad de llevarlo a hacer esa travesía?
El querer a un perro implica protegerlo. No es sólo alimentarlo y sacarlo a pasear de vez en cuando.
¿Cuál es tu opinión sobre la actitud de este hombre que abandonó a su perro en una montaña? Leo tu comentario.
Te pedimos por favor que compartas esta historia con tus amigos y familiares. El tener perros o gatos en casa implica un compromiso que mucha gente no puede o no sabe cumplir y el que sufre es el animal.
Fuente: https://www.viralistas.com