Husky sola al costado de la carretera y dentro de una jaula.
La historia de una husky sola al costado de la carretera. A pesar de todo lo vivido no puede parar de sacudir la cola y es muy dulce.
Georgina Milhet salió de paseo con su caballo y su sobrino en los suburbios de Miami, cuando recorrían una carretera por la que nunca habían estado antes. Los graneros y las granjas desaparecieron de su vista, mientras la carretera se estrechaba…

Fue entonces que Milhet divisó una jaula.
«Vi la jaula y una perra con la lengua afuera.» dijo Milhet. «Me bajé del caballo y me acerqué a la para ver cómo reaccionaría”.
Milhet liberó al Husky pero algo estaba muy mal. «Fue cuando pensé: ‘¡Dios mío, no puede caminar!’ Pensé que estaba herida o había sido atropellada.»

Las cuatro patas del animal estaban dobladas en ángulos extraños y torcidas, de modo que parecían rotas.
Sus codos en los que sostenía todo su peso, estaban cubiertos de costras y ensangrentados, al igual que su estómago.

«Nunca he visto nada así», dijo Milhet. «Sus uñas estaban tan encarnadas que crecieron detrás de sus patas.»
El sobrino de Milhet le sugirió volver más tarde en automóvil, pero no Milhet no pensaba lo mismo. «Yo no la podía dejar allí», agregó Milhet.
La mujer colocó a la husky en el lomo del caballo y volvió a casa. Milhet bañó a la perra a la que llamó Lucky.
Su cuerpo estaba cubierto de heridas punzantes y pequeñas laceraciones, que Milhet supuso que eran debido a que la perra estuvo atrapada en la jaula. Aunque Lucky estaba claramente sufriendo, su cola nunca paró de menearse.
Lucky al veterinario y con tratamiento
El GTS Husky Rescue, un grupo local de rescate de animales, oyó hablar de la situación de Lucky y la llevó a una clínica veterinaria al día siguiente.
Se estima que tiene entre 2 y 3 años de edad. Las pruebas revelaron que el husky probablemente había sobrevivido por su cuenta durante algún tiempo sin comidas regulares

Sin embargo, los rayos X de las piernas de Lucky dejaron a sus médicos aún más perplejos.
«Tiene grandes deformidades en sus patas.», agregó Natalie Lucia, directora del GTS Husky Rescue.
«Puede ser como resultado de haber estado en la jaula, haber sido causada por lesiones graves por las que nunca fue tratada o la posibilidad que haya nacido así.»
Como la perra no podía caminar más de ocho pasos a la vez, Lucia sabía que tenía que arreglar las patas lo antes posible para que pudiera tener una vida normal.
«La llevamos a un cirujano ortopédico de primera en nuestra área y él ni siquiera recomendó la cirugía», dijo Lucia, «Eso requeriría demasiadas cirugías y sería muy doloroso debido a la naturaleza de la lesión».
Una vez que su salud mejore, recibirá cuatro prótesis especialmente diseñadas para su forma única de caminar. Con la asistencia y protección de sus prótesis, Lucky finalmente podrá correr y jugar por primera vez en su vida.
Lucky está aprovechando los placeres simples de estar en un ambiente familiar. Etá feliz de estar en su primera cama de perro, aunque adora ser cargada como un bebé.
Lucía no tiene dudas que, cuando Lucky esté lista, muchas personas estarán ansiosas de adoptarla.
«Después de todo lo que pasó, todavía es el animal más dulce.» comentó Lucia.

Mientras tanto, Lucky y sus salvadores están dando un paso a la vez.
Ojalá que Lucky pueda recuperarse y poder correr como cualquier otro perro. La historia de esta husky sola al costado de la carretera merece tener un final feliz.
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Fuente: The Dodo